En la City University of Hong Kong han dado con un sistema para obtener energía de forma original. Se trata de un generador eléctrico basado en gotas de agua. No es otra cosa que el resultado de una de las muchas investigaciones destinadas a paliar la crisis energética.
Aun así, se trata de un proyecto experimental. Y pese al éxito de los resultados todavía queda tiempo para crear un sistema real que funcione de forma eficiente. Una gota de agua puede generar energía mediante el efecto triboeléctrico (por contacto entre materiales, como el frotamiento). Sin embargo, la conversión energética es realmente baja.
El equipo de científicos de Hong Kong ha mejorado este ratio de conversión. Su generador eléctrico basado en gotas alcanza los 50,1 W por metro cuadrado. Y esto son miles de veces más que otros dispositivos similares. La diferencia la marcala introducción d un transistor de efecto de campo, un transistor que emplea un campo eléctrico para controlar la conductividad de un canal.
Los científicos han comprobado que una gota de 100 microlitros (siendo un microlitro equivalente a la millonésima parte de un litro) con 15 centímetros de caída puede generar un voltaje de más de 140 V. Esta potencia puede generar luz como para encender 100 bombillas LED.
La investigación de la City University of Hong Kong resulta interesante porque supone aprovechar un fenómeno existente. En realidad esta es la filosofía de las energías renovables en su conjunto. La solar aprovecha el impacto de los rayos del sol, mientras que la eólica se aprovecha del soplido espontáneo de los vientos. El generador eléctrico basado en gotas podría actuar con la recogida de la lluvia. Aunque también podría hacerlo con agua almacenada.
La generación de energía de forma pasiva
También existen, sin embargo, otras formas de energía desaprovechadas. Son tipo de energía que no procede de la naturaleza. La generamos los humanos con nuestra actividad. Por el momento se trata de proyectos experimentales, al igual que ocurre con el generador eléctrico basado en gotas.
Uno de los casos más llamativos es el concepto de un gimnasio capaz de aprovechar la energía cinética. Son muchas las personas que acuden a estos centros a entrenar diariamente. Corren en la cinta, hacen elíptica o bicicleta. Todas estas máquinas podrían estar conectadas a un generador. Este haría la transformación de energía cinética a electricidad. Se calcula que un usuario podría generar entre 50 y 150 vatios en un entrenamiento de 30 minutos.
Pero también hay otros ejemplos. El tráfico se podría aprovechar con un badén, cuya compresión al pasar las ruedas de un coche ayudara a mover unas poleas conectadas a un generador. Pero es que también nuestro caminar podría generar electricidad. Se ha probado a acoplar a la base de un zapato una composición de materiales que al comprimirse se polaricen. Al generarse una diferencia de potencial es posible aprovechar la carga para obtener energía.
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