México ha invertido alrededor de 8 mil millones de dólares para construir una nueva refinería de petróleo, otros 100 millones de dólares para restaurar las operaciones de carbón y una reforma energética que dará prioridad a los combustibles fósiles sobre las energías renovables. El Climate Action Tracker asegura que las políticas del gobierno de Andrés Manuel López Obrador están criticando el Acuerdo de París y están llevando al país a romper su compromiso de combatir el cambio climático.
El consorcio científico internacional evaluó las medidas tomadas por los países para cumplir con el acuerdo y rebajó la calificación otorgada al plan de reducción de emisiones de México de "inadecuado" a "muy insuficiente". El Ministerio de Medio Ambiente propuso el plan en diciembre del año pasado, que prevé reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 22% para 2030, lo mismo que prometió en 2015.
-México
Esto viola el Acuerdo de París, que requiere que los estados miembros incrementen sus esfuerzos para frenar el calentamiento global cada cinco años. México no es el único país que no cumple con esta cláusula. Otros nueve países, como Brasil o Rusia, no han hecho lo suficiente para lograr el objetivo del tratado: mantener la temperatura media mundial por debajo de los 2 grados centígrados en relación con los niveles preindustriales.
Sophia Gonzalez-Zuniga, analista del Climate Action Tracking Group, dijo: "Es impactante que México haya pasado de ser un país que lidera la respuesta de la región al cambio climático en la dirección opuesta". Expertos señalaron que el país no solo mantiene el mismo porcentaje de las metas de reducción de emisiones, pero luego de revisar los resultados del cálculo, ahora se estima que el país producirá 774 millones de toneladas de dióxido de carbono para 2030, lo que es más de 763 millones pronosticado en 2015.
México es uno de los 15 mayores emisores de gases de efecto invernadero del mundo, representando el 1.47% del total mundial, pero según la Alianza Científica, no tiene la responsabilidad de hacer mayores esfuerzos para combatir el cambio climático.
El país ha eliminado de su objetivo el compromiso de reducir sus emisiones en un 50% desde los niveles de 2000 para 2050, que era el objetivo hace cinco años. Al igual que China, Estados Unidos o la Unión Europea, no existe un objetivo establecido para lograr cero emisiones. El Climate Action Tracker también advirtió que México carece de transparencia e información para explicar cómo logrará sus objetivos.
Al mismo tiempo, la política del gobierno apunta en la dirección opuesta a la descarbonización económica. La semana pasada, la Cámara de Diputados aprobó la polémica reforma eléctrica de López Obrador, lo que significa que las plantas paraestatales de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) (provistas principalmente de hidrocarburos) tendrán prioridad para los particulares, todos ellos suben su producción a la red. La mayoría de las energías renovables del país.
-Política energética
La política energética se basa únicamente en supuestos ideológicos. No les importa si la matriz eléctrica en México está sucia y más cara, tienen que subsidiarla. Adrián Fernández, director de la Iniciativa Climática Mexicana, lamentó que esto sea absolutamente irracional. En 2013, Enrique Peña Nieto (Enrique Peña Nieto), el entonces presidente, abrió la industria energética a la inversión privada, lo que impulsó el rápido crecimiento de los parques solares y fotovoltaicos. Ahora, Handbrake está en un estado expandido.
El Ministerio de Medio Ambiente rechazó la solicitud de este diario de una entrevista sobre la posibilidad de reformas eléctricas para enfrentar el calentamiento global, y lo limitó a responder en un comunicado que el proceso legislativo está por aprobarse. La iniciativa debe ahora ser debatida en el Senado, y esperar ganar el apoyo del gobernante partido Morena en la mayoría del partido.
Los argumentos ambientales creen que el objetivo de controlar las emisiones de gases de efecto invernadero no es ambicioso, porque la epidemia "ha golpeado severamente al país y la economía ha obstaculizado su crecimiento en los últimos años". Descartar: "Cada país puede decidir libremente su objetivo justo de nivel y capacidades de desarrollo nacional".
Anaid Velasco del Centro Mexicano de Derecho Ambiental (CEMDA) dijo que si México no tiene mayores ambiciones en la reducción de emisiones es para evitar poner en riesgo la política energética que propugna el mandatario. Velasco recordó que si bien no existe un mecanismo para sancionar el incumplimiento del Acuerdo de París, la reforma puede tener consecuencias legales tanto a nivel nacional como internacional.
-Tratados de libre comercio con Estados Unidos
Los acuerdos de libre comercio de México con Estados Unidos, Canadá o la Unión Europea consideran la inversión en el sector energético. Advirtió: “El riesgo es que al hacer que los privilegios de la CFE obstaculicen la inversión extranjera, pueden llevarlo a un panel internacional de expertos que debe brindar compensación a los inversionistas privados”.
Ante el cambio climático, el desinterés del gobierno mexicano no se limita a la política energética. Los ejecutivos han optado por invertir en grandes proyectos, como el tren maya en la península de Yucatán y la refinería Dos Bocas en Tabasco, mientras continúan recortando el presupuesto de la ya débil agencia ambiental del país. A fines del año pasado, el Congreso canceló más de cien fideicomisos, uno de los cuales tenía como objetivo combatir el calentamiento global.
"La posición oficial relacionada con el cambio climático es ignorarlo. Ignorar los problemas globales que estamos resolviendo, y también estamos involucrados. Al mismo tiempo, México es particularmente vulnerable al impacto del calentamiento de sus 11.000 kilómetros de costa, y su entorno geográfico hace que México se atasque en un camino de huracanes que se vuelve cada vez más violento.
Fuente:
https://www.ambientum.com/ambientum/energia/mexico-polemica-apuesta-por-los-combustibles-fosiles.asp
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