Recibir la factura de la luz no es lo más emocionante del mes, pero si acabas de instalar un nuevo sistema solar, seguro que la esperas con curiosidad. ¿Cuánto has ahorrado? ¿Cómo se compara con tus facturas anteriores?
Mientras que la mayoría de los recién llegados a la energía solar verán un impacto favorable en su primera factura, otros pueden estar sorprendidos o decepcionados.
Puede que te preguntes “¿por qué mis facturas de energía siguen siendo altas después de adquirir energía solar?“.
En este post, veremos las tres razones más comunes por las que su factura de energía sigue siendo alta después de poner paneles solares en tu tejado y nuestros mejores consejos para resolverlas. Te mereces sacar el máximo provecho de tu inversión y estos consejos deberían ayudarte a maximizar tu potencial de ahorro.
Razón 1: Usas la mayor parte de la electricidad por la noche.
Si trabajas durante el día, probablemente descubrirás que sus electrodomésticos y resto de aparatos eléctricos funcionan más tiempo después de las horas en que el sol no brilla (y tu energía solar no está generando electricidad). Desde el horno y el lavavajillas hasta la lavadora y el televisor, ¡toda esta electricidad puede ser muy importante! Si a esto le añadimos que probablemente los uses durante las horas punta, tienes la receta perfecta para una factura de electricidad muy elevada.
La realidad es que si usas la mayor parte de la electricidad por la noche, la mayor parte de tu energía solar se exportará a la red, y lo más rentable siempre es el autoconsumo.
Solución 1: Adapta tu consumo con tu sistema solar.
Planifica con antelación para poder sincronizar tus rutinas domésticas con tu sistema solar.
Lo más importante es recordar que los paneles solares no generan electricidad cuando se pone el sol. Esto significa que, en ausencia de una batería solar, la electricidad que uses por la noche vendrá de la red, no de tu sistema solar.
Tienes que reajustar el uso de la energía para consumir más electricidad durante el día. ¿Pero cómo? Bueno, todo se reduce a dos factores clave: cambiar tus hábitos de consumo y (tus nuevos mejores amigos) los temporizadores.
Solución 2: Instalar una batería solar.
La otra solución, más eficaz (aunque más cara), sería instalar un sistema de almacenamiento doméstico. Esto te permitirá duplicar con creces su autoconsumo eléctrico al permitirte usar la energía solar autogenerada por la noche o en días nublados.
Razón 2: Consumes más electricidad que antes.
Algunos nuevos clientes de energía solar adoptan una mentalidad errónea en cuanto a su consumo de electricidad; piensan que tener energía solar significa que de repente pueden usar toda la electricidad que quieran, cuando quieran, y no tener que pagar más por ella. Esto no es así. La energía solar puede compensar el uso de energía diurna en tu casa, pero si aumentas el consumo de electricidad y asumes que la energía solar lo compensará todo, probablemente te llevarás una desagradable sorpresa en su próxima factura.
Solución: Estudia tus hábitos de consumo y cambia la carga cuando sea posible.
En primer lugar, comprueba si este es el problema. Consigue una copia de dos facturas de electricidad: una de antes de instalar la energía solar y otra de después. Compara los niveles de consumo de energía en horas punta y fuera de ellas entre ambas facturas y comprueba si hay algún cambio. Si estás consumiendo más energía en este ciclo, es probable que sea la razón del aumento de las facturas.
Si estás consumiendo más energía, la clave está en cambiar tus hábitos de consumo. Cambia la carga cuando puedas y sé consciente de evitar hacer algo como encender la calefacción todo el día y la noche a menos que sea absolutamente necesario.
Si quieres tener información en tiempo real sobre tu consumo de electricidad y detectar realmente las oportunidades de ahorrar dinero, considera la posibilidad de instalar un contador inteligente. Te proporciona una representación gráfica de tu consumo de energía a lo largo del día y te permite ajustar sus patrones de uso para una mejor eficiencia.
Razón 3: Algo va mal en tu sistema.
¿Qué pasa si ya estás usando la mayor parte de tu energía durante las horas de menor consumo y practicando hábitos de consumo inteligentes, pero tus facturas siguen siendo más altas de lo esperado?
Hay formas de calcular si tu sistema solar está produciendo la potencia esperada en función de su tamaño, su ubicación y la época del año.
Para empezar, la mayoría de los inversores solares deberían poder indicarle cuál ha sido su producción media diaria por kW durante los últimos 12 meses, que puede comparar con la media diaria de su estado. Su media debería estar al menos dentro del 90% de la media.
Si tienes tu sistema desde hace menos de 12 meses, puedes calcularlo basándose en su media mensual. La calculadora de vatios fotovoltaicos del NREL es un recurso gratuito que permite estimar la producción de energía de las instalaciones solares conectadas a la red en un mes determinado, en función de tu ubicación. Los datos de entrada pueden parecer un poco complicados a primera vista, pero cada campo tiene un icono de información adicional que explica su significado.
Por supuesto, puedes saltarte este paso y llamar a la empresa que te vendió el sistema. Recuerda que tus paneles deberían estar cubiertos por una garantía de al menos 10 años. Una empresa de confianza estará encantada de venir a revisar el sistema para asegurarse de su funcionamiento y rendimiento.
El conocimiento es el poder.
La energía solar es, sin duda, una forma fantástica de reducir la dependencia de la red eléctrica y recortar las facturas de electricidad. Si no estás viendo el rendimiento de la inversión que esperabas, lo más probable es que no estés “aprovechando mientras brilla el sol”. Con los paneles, sólo conseguirás un verdadero ahorro si eres consciente de tus patrones de consumo energético y usas la mayor parte de la electricidad durante el día. Si instalas una batería solar y tienes un sistema lo suficientemente grande, puedes cubrir la mayor parte (si no toda) de tu consumo energético diurno y nocturno con electricidad autogenerada.
También es posible que te hayan engañado. Algunos vendedores de energía solar exageran el ahorro que supone la energía solar o incluso mienten. Los consumidores deberían ver banderas rojas si les prometen o garantizan facturas de 0, porque es poco probable, especialmente sin una instalación de baterías. Un distribuidor de energía solar de confianza y de buena reputación te proporcionará una idea realista del ahorro que puedes esperar en tus circunstancias particulares.
Fuente:
https://ecoinventos.com/facturas-electricidad-altas-despues-de-instalar-energia-solar/
Planifica con antelación para poder sincronizar tus rutinas domésticas con tu sistema solar.
Lo más importante es recordar que los paneles solares no generan electricidad cuando se pone el sol. Esto significa que, en ausencia de una batería solar, la electricidad que uses por la noche vendrá de la red, no de tu sistema solar.
Tienes que reajustar el uso de la energía para consumir más electricidad durante el día. ¿Pero cómo? Bueno, todo se reduce a dos factores clave: cambiar tus hábitos de consumo y (tus nuevos mejores amigos) los temporizadores.
Solución 2: Instalar una batería solar.
La otra solución, más eficaz (aunque más cara), sería instalar un sistema de almacenamiento doméstico. Esto te permitirá duplicar con creces su autoconsumo eléctrico al permitirte usar la energía solar autogenerada por la noche o en días nublados.
Razón 2: Consumes más electricidad que antes.
Algunos nuevos clientes de energía solar adoptan una mentalidad errónea en cuanto a su consumo de electricidad; piensan que tener energía solar significa que de repente pueden usar toda la electricidad que quieran, cuando quieran, y no tener que pagar más por ella. Esto no es así. La energía solar puede compensar el uso de energía diurna en tu casa, pero si aumentas el consumo de electricidad y asumes que la energía solar lo compensará todo, probablemente te llevarás una desagradable sorpresa en su próxima factura.
Solución: Estudia tus hábitos de consumo y cambia la carga cuando sea posible.
En primer lugar, comprueba si este es el problema. Consigue una copia de dos facturas de electricidad: una de antes de instalar la energía solar y otra de después. Compara los niveles de consumo de energía en horas punta y fuera de ellas entre ambas facturas y comprueba si hay algún cambio. Si estás consumiendo más energía en este ciclo, es probable que sea la razón del aumento de las facturas.
Si estás consumiendo más energía, la clave está en cambiar tus hábitos de consumo. Cambia la carga cuando puedas y sé consciente de evitar hacer algo como encender la calefacción todo el día y la noche a menos que sea absolutamente necesario.
Si quieres tener información en tiempo real sobre tu consumo de electricidad y detectar realmente las oportunidades de ahorrar dinero, considera la posibilidad de instalar un contador inteligente. Te proporciona una representación gráfica de tu consumo de energía a lo largo del día y te permite ajustar sus patrones de uso para una mejor eficiencia.
Razón 3: Algo va mal en tu sistema.
¿Qué pasa si ya estás usando la mayor parte de tu energía durante las horas de menor consumo y practicando hábitos de consumo inteligentes, pero tus facturas siguen siendo más altas de lo esperado?
Hay formas de calcular si tu sistema solar está produciendo la potencia esperada en función de su tamaño, su ubicación y la época del año.
Para empezar, la mayoría de los inversores solares deberían poder indicarle cuál ha sido su producción media diaria por kW durante los últimos 12 meses, que puede comparar con la media diaria de su estado. Su media debería estar al menos dentro del 90% de la media.
Si tienes tu sistema desde hace menos de 12 meses, puedes calcularlo basándose en su media mensual. La calculadora de vatios fotovoltaicos del NREL es un recurso gratuito que permite estimar la producción de energía de las instalaciones solares conectadas a la red en un mes determinado, en función de tu ubicación. Los datos de entrada pueden parecer un poco complicados a primera vista, pero cada campo tiene un icono de información adicional que explica su significado.
Por supuesto, puedes saltarte este paso y llamar a la empresa que te vendió el sistema. Recuerda que tus paneles deberían estar cubiertos por una garantía de al menos 10 años. Una empresa de confianza estará encantada de venir a revisar el sistema para asegurarse de su funcionamiento y rendimiento.
El conocimiento es el poder.
La energía solar es, sin duda, una forma fantástica de reducir la dependencia de la red eléctrica y recortar las facturas de electricidad. Si no estás viendo el rendimiento de la inversión que esperabas, lo más probable es que no estés “aprovechando mientras brilla el sol”. Con los paneles, sólo conseguirás un verdadero ahorro si eres consciente de tus patrones de consumo energético y usas la mayor parte de la electricidad durante el día. Si instalas una batería solar y tienes un sistema lo suficientemente grande, puedes cubrir la mayor parte (si no toda) de tu consumo energético diurno y nocturno con electricidad autogenerada.
También es posible que te hayan engañado. Algunos vendedores de energía solar exageran el ahorro que supone la energía solar o incluso mienten. Los consumidores deberían ver banderas rojas si les prometen o garantizan facturas de 0, porque es poco probable, especialmente sin una instalación de baterías. Un distribuidor de energía solar de confianza y de buena reputación te proporcionará una idea realista del ahorro que puedes esperar en tus circunstancias particulares.
Fuente:
https://ecoinventos.com/facturas-electricidad-altas-despues-de-instalar-energia-solar/
0 comentarios:
Publicar un comentario