Río de Janeiro, conocida como la "Ciudad Maravillosa", se encuentra en el bioma de la Mata Atlántica, que solía cubrir toda la costa de Brasil, pero ahora solo queda el 27% de la cobertura original. Las favelas de Río a menudo se han construido en laderas que antes estaban cubiertas de vegetación, y los residentes más pobres, que suelen vivir en áreas de difícil acceso, a veces talan árboles para construir sus casas. Esto no solo tiene un impacto ambiental, sino que también aumenta el riesgo de deslizamientos de tierra durante las lluvias. El programa de las Guardianas de la Selva tiene como objetivo frenar la construcción ilegal y promover una gestión adecuada de residuos.
Márcia y otras mujeres en el programa son fundamentales para conciliar la preservación del medio ambiente con las necesidades sociales de las comunidades. Además de su labor de conservación, también actúan como ojos y oídos en el terreno, informando a las autoridades locales sobre cualquier actividad ilegal o problemas ambientales. Además, el programa tiene un impacto positivo en la autoestima de estas mujeres, muchas de las cuales tienen rutinas diarias difíciles. Además de la preservación ambiental, reciben formación en diversos temas, desde conocimientos sobre la selva tropical hasta habilidades digitales.
El programa no solo se centra en la conservación y la gestión de residuos, sino que también busca involucrar a las comunidades locales y abordar el "racismo ambiental", que ha excluido históricamente a ciertos sectores y territorios de los debates ambientales más amplios. Las mujeres actúan con protocolos de seguridad debido a la presencia del crimen organizado en muchas de las favelas, lo que agrega un nivel adicional de desafío a su trabajo. A pesar de estas dificultades, las Guardianas de la Selva están decididas a cambiar la realidad ambiental de Río de Janeiro.
Fuente: https://elpais.com/america-futura/2023-10-21/las-mujeres-que-defienden-la-selva-desde-las-favelas-de-rio-de-janeiro.html
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