El Día Internacional del Aire Puro, promovido por la ONU, busca que gobiernos, organismos, empresas y ciudadanos tomen acciones concretas. Si se observa una ciudad desde un edificio alto, es fácil notar la contaminación. Según la OMS, el 99% de la población mundial respira aire contaminado. Este día, instaurado en 2019, busca crear conciencia sobre la importancia de un aire limpio y su relación con el cambio climático, la salud y los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
La meta es promover investigaciones y prácticas para mejorar la calidad del aire, destacando su impacto directo en la salud y el bienestar de las personas. Según el IPCC, la contaminación atmosférica es una de las principales causas de enfermedades respiratorias, afectando tanto la salud humana como los ecosistemas. Este desafío global requiere soluciones coordinadas y conjuntas, algo que busca el lema del Día Internacional del Aire Limpio por un Cielo Azul: “Juntos por un aire limpio”.
La contaminación atmosférica tiene efectos devastadores en la salud. Provenientes de actividades humanas como la industria y la quema de combustibles fósiles, contaminantes como el CO2 y las partículas PM2.5 causan millones de muertes prematuras cada año, afectando el sistema respiratorio y cardiovascular. También incrementan la vulnerabilidad a infecciones y enfermedades crónicas, afectando desproporcionadamente a niños, ancianos y personas con afecciones preexistentes.
Un reto global
La contaminación del aire es un problema global que afecta a todos, y su reducción también ayudaría a mitigar el cambio climático. El IPCC señala que los mismos gases que contribuyen al calentamiento global también degradan la calidad del aire. Por ejemplo, el ozono troposférico, formado por la interacción de contaminantes con la luz solar, agrava el asma y otras enfermedades respiratorias.
Estrategias para mejorar la calidad del aire
Diversas organizaciones proponen medidas para reducir la contaminación atmosférica, como promover el uso del transporte público, bicicletas o vehículos eléctricos, reducir el consumo de energía y fomentar el reciclaje. También se destacan las mejoras en sistemas de calefacción y la importancia de la educación ambiental para cambiar comportamientos que contribuyen a la contaminación del aire.
El papel de las políticas públicas
Las políticas públicas son clave en la lucha contra la contaminación atmosférica. Zonas de bajas emisiones y el fomento de energías renovables son ejemplos de medidas efectivas. Los expertos del IPCC recomiendan la inversión en tecnologías limpias y el establecimiento de impuestos al carbono para incentivar prácticas sostenibles.
Cada individuo puede contribuir a mejorar la calidad del aire reduciendo el uso de automóviles, reciclando y apoyando políticas ambientales. La ONU invita a unirse a la campaña en redes sociales con etiquetas como #RespiraVida para concienciar sobre la importancia del aire limpio.
Este día nos recuerda la urgencia de actuar frente a la contaminación del aire, un problema que afecta tanto la salud humana como el medio ambiente. La Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible también reconoce la importancia de reducir la contaminación atmosférica para alcanzar sus objetivos. Es fundamental que gobiernos y ciudadanos trabajen juntos para lograr un aire más limpio.
Fuente: https://www.infobae.com/salud/ciencia/2024/09/07/contaminacion-del-aire-por-que-es-un-grave-problema-global-que-afecta-a-la-salud-y-el-medio-ambiente/
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